Una cocina rústica de leña es una alternativa perfecta a las modernas cocinas eléctricas. Son muchos los expertos que aseguran que solo este tipo de calor consigue carnes en su punto y con sabor único. Sabemos que es una forma de cocinar muy antigua, pero gracias a los modelos actuales de cocina rústica de leña, podrás mantener ese sabor especial y auténtico de los alimentos.
Si estás buscando una cocina rústica de leña, te animamos a comprarla, pero antes debes saber cómo funciona, las ventajas que supone tener una y la técnica de cocina que requiere. Por eso, hemos preparado este artículo. Te contamos todo sobre una cocina rústica de leña. Atento…, que prendemos la leña.
¿Cómo funciona una cocina rústica de leña?
La característica principal de una cocina rústica de leña es que utiliza ese material como combustible para realizar su función, es decir, la leña. Obvio, ¿verdad? Hasta aquí todo claro, pues continuamos. Sin embargo, las cocinas más modernas utilizan gas o electricidad para generar calor y cocinar, esa es la principal diferencia.
Podemos decir que la cocina rústica de leña es el origen del resto de cocinas. ¿Por qué? El fuego de la leña se ha utilizado desde la antigüedad para cocinar, por eso, afirmamos que la cocina de leña es la primera que ha conocido la humanidad. Esto no quiere decir que las cocinas de leña que hoy se comercializan sean como las de antaño. Ha habido una gran evolución hacia el control, la seguridad, la comodidad, el diseño y el valor estético. Aun así, las actuales tienen mucho que ver con las de antes, nos explican desde
Ambifuego, fabricantes y distribuidores de cocinas rústicas, especialistas en chimeneas de gas y eléctricas desde 1995, con un equipo de profesionales atentos a las nuevas tendencias del sector.
¿Cómo funciona una cocina rústica de leña? Su funcionamiento es sencillo, tiene una parte donde se sitúa y se prende la leña y una parte superior, que es donde se recibe directamente el calor del fuego sobre el que se cocina. Las más completas incluyen horno, aunque las hay sin él también.
¿Cuáles son las partes de una cocina de leña?
Existen diversos modelos de cocina rústica de leña, aunque existan diferencias, todas tienen las mismas partes básicas. Las diferencias suelen ser en el tamaño, el diseño y el material con el que se fabrican.
- Encimera, la zona para cocinar. La encimera es la parte superior que suele ser lisa y es dónde se colocan las sartenes y ollas para cocinar. También se le conoce con el nombre tradicional de “hogar”. Según el tamaño y el modelo, puede tener zonas marcadas, como placas y aros, para recibir el calor de la zona inferior.
- El horno. No todas las cocinas de leña tienen la función de horno, pero sí gran parte de ellas. Es la zona favorita de los amantes de estas cocinas porque se pueden preparar asados únicos. El horno está bajo la zona de cocina. Se trata de un hueco que tiene una bandeja central para situar la comida para su preparación.
- La zona de combustión. Todas las cocinas de leña tienen la zona de combustión. Es una zona inferior con una puerta, dentro de la cual, se mete la leña y se prende para lograr la combustión. Es el lugar en el que se enciende la cocina para su funcionamiento.
- Zona de recogida de cenizas. Casi todas las cocinas de este tipo tienen una parte, una especie de cajón, que es donde se va depositando parte de la ceniza que produce la leña cuando se consume. Es una zona que debe limpiarse a menudo.
Recomendaciones antes de decidirte por una cocina rústica de leña
A continuación, te damos 4 recomendaciones antes de decidirte a comprar una cocina rústica de leña.
La instalación exige unas condiciones específicas
Puede que te guste mucho una cocina rústica de leña, pero que tu casa no reúna las condiciones adecuadas para instalarla. Debes tener en cuenta que necesita ir conectada a una chimenea con salida de humos a la calle. Además, este tipo de cocina se debe colocar en una zona amplia y aireada. Recuerda que la seguridad es fundamental, por ello, no te saltes ninguna recomendación del fabricante.
El mantenimiento y la limpieza
Si lo que estás buscando es una cocina y un horno fáciles de limpiar, una cocina rústica de leña no es la mejor opción para ti porque requiere un mantenimiento constante. La limpieza debe ser habitual.
Cocinar en leña, no es lo mismo
Si te has decidido a comprar una cocina rústica de leña y nunca has tenido una, ¡ojo! Vas a notar la diferencia mucho…, muchísimo. Tendrás que cambiar la forma de cocinar. Además, tendrás que comprar todo lo necesario para cocinar y que sea apto para este tipo de cocinas. En cuanto a la forma de cocinar, debes tener en cuenta que la cocina rústica de leña te exigirá estar muy atenta a la cocina, vigilar la comida constantemente, así como moverla. En el caso del horno, debes prestar atención a la hidratación de la carne y el pescado si quieres tener un asado jugoso.
Debes saber encender y mantener el fuego
Las cocinas de leña que se comercializan hoy en día son seguras y más sencillas de usar que las tradicionales, pero es cierto que funcionan con fuego directo y llama. Debes tener en cuenta el procedimiento que debes seguir cada vez que quieras usar tu cocina. Pero, ¡no te preocupes! Es cuestión de práctica. Además, estas cocinas traen un manual completo de uso.
Ventajas de las cocinas rústicas de leña
Cada vez son más las personas que se decantan por una cocina rústica de leña debido a las grandes ventajas que ofrece. A continuación, te enumeramos estas ventajas:
- Sistema de combustión lenta. Los modelos actuales de cocinas de leña cuentan con un sistema de combustión lenta. Este sistema hace que el consumo de leña sea menor. Esto es una ventaja porque no tendrás que tener grandes cantidades almacenadas en casa.
- Cierre hermético. Otra de las ventajas que ofrece una cocina rústica de leña es que se cierra herméticamente. Esto hace que no salga la madera quemada y el humo. Piensa que este era el mayor inconveniente de las cocinas tradicionales o modelos antiguos.
- Una vida útil muy larga. Debes tener en cuenta que la inversión inicial para comprar una cocina rústica de leña es algo elevada, pero se amortiza con el tiempo debido a que este tipo de cocinas tienen una vida útil muy larga.
- Funciona como un sistema de calefacción. Estas cocinas de leña tienen otra gran ventaja y, es que, funcionan como un sistema de calefacción debido al calor que generan. Mantienen el calor en la cocina y también en el resto de las estancias de la casa siempre que se instale un sistema para que el aire caliente circule por toda la vivienda.
Un poco de historia…, “la cocina económica” o cocina rústica de leña
Cuando se inventó la estufa, se aprovechaba su extremo superior, a mucha temperatura, para cocinar. Después, se fabricó la estufa de fundición, la llamada estufa salamandra, y las estufas domésticas utilizaron el mismo material. Fue así como empezó a fabricarse la llamada cocina económica, que era de mayor tamaño que la estufa y tenía más accesorios y usos.
Su nombre, cocina económica, proviene del ahorro que supuso confinar el fuego en una cámara construida con ladrillos, que calentaba una superficie de metal donde poder cocinar los alimentos. De esta manera, los utensilios no estaban en contacto directo con el fuego.
El origen de la cocina económica se fecha en el siglo XVII. En aquel entonces, el inventor británico John Sibthrope patentó una versión metálica de la misma, que se alimentaba de leña o carbón. Su implantación fue progresiva debido a que el proceso de cocción era muy lento al tener que calentar la pieza de hierro intermedia.
En el año 1802, George Bodley, patentó una versión mejorada de hierro forjado. Esta tenía un calentamiento uniforme, con un sistema elaborado de escapes que se convirtió en el prototipo de cocina moderna.
En España se comercializaron dos modalidades de cocina económica. Por un lado, estaban las llamadas “cocinas negras”, fabricadas en hierro fundido y eran más caras, estaban esmaltadas en color negro y decoradas con herrajes de latón. Por otro lado, estaban las “cocinas blancas”, fabricadas en chapa blanca y eran más económicas. Pero, la llegada de la electricidad y el gas butano originó que poco a poco se dejasen de usar. Y es que, la vida moderna exigía aparatos más eficientes y dónde los alimentos se cocinaran en menos tiempo, que ensuciaran menos y que ocuparan menos espacio.
Como son cocinas de gran volumen y muy pesadas, permanecieron en muchas cocinas, conviviendo con las modernas.
En la actualidad, las cocinas de leña vuelven a estar de moda, especialmente en casas rurales o casas de campo, ya sean rehabilitadas o de nueva construcción. Los modelos actuales se fabrican en hierro fundido o en acero. La principal innovación con respecto a las tradiciones es la mejora en las técnicas de combustión.
Cocina rústica de leña de doble combustión
Estas cocinas rústicas de leña con doble combustión son mucho más eficientes y seguras.
¿Cómo se realiza la doble combustión? La doble combustión se realiza en dos fases. En la primera fase, la leña se quema, liberando gases. En la segunda fase, los gases calientes se queman antes de que salgan por la chimenea al exterior. Con este sistema de doble combustión se generan menos residuos, se emiten menos gases y partículas. También se consigue mayor temperatura, esto logra que el rendimiento aumente y, por ello, la madera dure más. Es un proceso mucho más eficiente, limpio y mucho menos contaminante.
Terminamos el artículo recomendando la cocina de leña o bilbaína por muchas razones, y es que, son la alternativa perfecta a la cocina de gas o eléctrica. Este tipo de cocinas son muy respetuosas con el medio ambiente debido a que el combustible proviene de un recurso renovable. Este tipo de cocinas tienen una doble prestación, por un lado, cocinan los alimentos y, por otro lado, calientan el espacio. Son tremendamente funcionales, decorativas, integrándose a la perfección en cocinas modernas y contemporáneas.