La crisis trajo consigo una serie de negocios que por su rentabilidad, su poca competencia o por simplemente la ilusión de hacerlo mejor que otros del sector, llenaron el mercado de empresas con similares objetos sociales. Esto fue algo bastante común, al igual que lo es que otras tantas empresas no pudieron aguantar el tirón de la crisis.
Y es que una vez que una empresa se quedaba sin capital líquido y tenía que afrontar pagos, se daban cuenta con que las entidades bancarias no estaban dando créditos ni descuentos de facturas a casi nadie, siendo este el motivo principal por el que las empresas no pudieron afrontar sus obligaciones.
Centrándonos en el sector de la hostelería, además de abrirse una gran cantidad de bares por personas que no eran del sector, también se desarrollaron muchas empresas de Catering. Este modelo de negocio basado en dar comidas, cenas, desayunos o almuerzos para eventos suele ser un negocio rentable.
La inversión que se necesita es asumible, y con cada evento vas amortizando la inversión hasta verla satisfecha en un breve espacio de tiempo, siempre que los servicios tengan continuidad. Por lo tanto, mucha gente vio en este negocio a la gallina de los huevos de oro, sobre todo restaurantes que querían complementar los servicios diarios con el catering.
En el artículo de hoy vamos a ver cómo el sector del catering se ha recuperado, pero como veremos no para todos igual. Ya que aunque la rentabilidad del sector ha crecido desde 2013, no es igual para todos, y las grandes empresas salen más beneficiadas respecto a las microempresas.
La recuperación no es igual para todos
La recuperación económica se está haciendo esperar en algunos sectores. Y a algunos les está costando más que a otros como, por ejemplo, al de los servicios de catering. Este sector se compone en un 75% de micronegocios y está abrumado por sus deudas. Los graves problema son la atomatiización del sector, el pequeño tamaño de sus negocios, y el intrusismo.
La facturación media de las empresas de catering no ha dejado de crecer desde 2013. Sin embargo, el crecimiento del sector no significa necesariamente una mejora de su salud financiera.
Los datos de 2017 muestran un importante ajuste de los márgenes comerciales, en un entorno cada vez más competitivo, de acuerdo con el análisis de Insight View. Por su parte, la aseguradora Crédito y Caución asegura que el 50% de los negocios de catering está en riesgo máximo o elevado de llegar a graves situaciones de impago y de convertirse en morosos,
En riesgo máximo se encuentran el 33% y en riesgo elevado en el 17% restante. El rating de morosidad es de un 3,5 en un índice de 0 a 10. Y lo peor recae en los pequeños, a la vista de sus cifras de facturación y de su crecimiento prácticamente inapreciable. El 77% de las empresas de catering tiene una antigüedad de más de cinco años.
Asimismo, los datos indican que los pequeños negocios facturan de media al año 350.000 euros y sin apenas aumentos, en contraposición a los 69 millones de euros que ingresan las grandes marcas, aunque sólo suponen el 2% del total del sector de catering en España.
La crisis, que entre 2011 y 2015 arrojó resultados negativos para el conjunto de los micronegocios de acuerdo con el estudio, ha dejado por otra parte una mala herencia: el ajuste de los márgenes empresariales. Es un hecho reconocido en el sector que los precios bajaron en esos años y ya no se han recuperado para el 75% de los negocios.. Esta situación provoca que darse a conocer a los potenciales clientes sea muy difícil, se funciona con el ” boca a boca”. Las redes sociales y, cada vez más, las páginas webs se han convertido en los aliados de su publicidad pero la fórmula de ganar nuevos clientes sigue siendo que un primero recomiende el catering a un segundo.
Una empresa que está triunfando en el sector del catering es El Molí Pan y Café, una empresa alicantina especializada en ofrecer a sus clientes los pequeños detalles que hacen el producto diferente al resto, cuidando siempre de cada detalle artesanal y tradicional. Esta empresa ha adaptado su modelo de negocio para dar servicios de catering de desayunos, fiestas y almuerzos.