Uno de los sectores más maltratados por la crisis ha sido el sector del libro físico, un sector que ha estado también amenazado por el libro electrónico o e-book. Como decíamos, la crisis le afectó de gran manera, cerrando muchas editoriales por falta de ingresos, debido en gran parte a la proliferación de ediciones virtuales más baratas, que además acababan siendo pirateadas y subidas a Internet
Pues bien, el sector del libro se ha recuperado, dando salida a nuevo contenido que le da aire al panorama sociocultural. Y ha sido este 2017 cuando hemos visto que a pesar de todas las amenazas de las que estaba rodeada el sector del libro físico, ha sabido reinventarse y “darle la vuelta a la tortilla”.
La estrategia seguida por las empresas editoriales ha sido realmente formidable, y precisamente hoy vamos a hablar de estrategias, en concreto de las estrategias competitivas. Este tipo de estrategias son imprescindibles en las empresas, y pueden ser a pequeña o gran escala, a continuación vamos a destacar los objetivos principales de estas estrategias.
Las estrategias competitivas
Empecemos definiendo que es una estrategia competitiva, una estrategia competitiva es el conjunto de características internas que la empresa tiene que desarrollar para obtener y reforzar una posición superior respecto a las empresas competidoras. El objetivo fundamental de las mismas es la obtención de una ventaja competitiva.
Un elemento que puede tener repercusión en la mejora de la posición competitiva de la empresa es la creación de valor, es decir, la generación de un valor añadido que pueda servir como elemento crucial para alcanzar el éxito en la asunción de una estrategia competitiva. El valor añadido ha sido muy importante en el desarrollo del sector del libro en los últimos años.
La creación de valor es uno de los motores más importantes para poder alcanzar el éxito de este tipo de estrategias, ya que en aquellos mercados donde hay mucha competencia y los márgenes comerciales son reducidos, las estrategias de precios bajos no tienen efecto. En estos casos, la creación de valor resulta una opción muy válida.
La creación de valor implica que, a un producto tradicional, muy explotado competitivamente, se le añade una característica muy innovadora que permite diferenciarlo y obtener una especial ventaja competitiva, siempre que sea un factor difícil de imitar por la competencia. ¿En que han consistido este tipo de ventajas competitivas en el sector del libro físico?
Pues bien, la principal baza de este sector ha sido la especialización de sus ediciones, que han tocado ámbitos con mucha demanda. Es el caso de las ediciones especiales o reediciones de libros “best seller”, además de promociones muy interesantes como regalar un e-book con la compra del libro físico.
Otras empresas se han dedicado a apostar por publicaciones eductivas, como es el caso de Ediciones Aljibe, una empresa con más de 25 años de experiencia, referente en publicaciones de temática educativa, especialmente en la atención a las Necesidades Educativas Especiales, cuyas publicaciones están orientadas a la mejora de la atención a la diversidad.
En conclusión, el sector del libro ha sabido explotar sus ventajas competitivas, hasta el punto de revertir la crisis que sufría hasta una situación que promete una batalla que nos dará muchos beneficios a los lectores, tanto de libros físicos como de libros virtuales.