Asfalto: tipos y usos

Si hablamos de asfalto, alquitrán o pavimento, todos sabemos a qué nos referimos. No en vano, el ochenta y cinco por cien de las carreteras del mundo, están fabricadas con este hidrocarburo, procedente del petróleo. Su viscosidad, aunque normalmente, lo conocemos en su estado sólido, se produce a partir de la destilación del petróleo, su tonalidad puede variar de marrón oscuro a negro y el proceso, puede darse de forma natural o artificial. Cuando el asfalto se presenta de forma natural, da como resultados lagos de asfalto, cuando se produce en una refinería, este se consigue a partir del petróleo crudo.

Sin embargo, como nos comentan desde Aglomerados GB, expertos en asfalto envasado, poco más sabemos de este elemento tan crucial en la industria, al menos los profanos al sector. Como aprender es gratis y el conocimiento nunca esta de más, hemos decidido ahondar un poco en este tema, puesto que el asfalto es parte de nuestro día a día, ya que se encuentra, prácticamente en todas partes.

Para empezar, diremos que el asfalto es una mezcla que puede darse de forma natural, de hecho, su origen es natural y no artificial, aunque puede producirse y, de hecho, se produce, a nivel industrial. Esta mezcla es el resultado del betún se asocia con materia mineral inerte. A temperaturas de entre cincuenta y cien grados centígrados, el asfalto permanece líquido, mientras que, a temperaturas inferiores, solidifica.

La mezcla se compone de mineral inerte, cal, alúmina, sílice, etc. y un hidrocarburo, el betún asfaltico. El asfalto natural, puede encontrarse a profundidades de entre tres y sesenta metros, siendo el asfalto residual obtenido por la destilación fraccionada del petróleo crudo la variedad común, utilizada en todo el mundo.

Por tratarse de un material termoplástico, se ablanda a medida que se calienta y se endurece según se vaya enfriando, poseyendo una cierta maleabilidad. Por eso es considerado el material básico en la pavimentación de las carreteras.

Tipos de asfalto y su composición

Aunque pueda parecer que el asfalto es uno y con una sola aplicación, la realidad es que no. Existen varios tipos de asfalto, cada uno con una composición determinada y unas aplicaciones o prestaciones que difieren entre sí.

Siendo así, podemos encontrar las siguientes opciones de asfalto:

Asfalto natural o nativo, que se obtiene de los lagos en los que se forma el denominado asfalto lacustre. Este tipo de asfalto se utiliza para hacer pavimentos, impermeabilizar estructuras, detener las vibraciones causadas por máquinas en los cimientos, túneles y subterráneos e incluso en la fabricación de pegamento marino y el revestimiento de zanjas.

El asfalto de roca, procede de una formación rocosa natural, habitualmente caliza o arenisca que se impregna con el betún en un seis a catorce por ciento.

Luego encontramos el asfalto refinado que se obtiene calentando el alquitrán de forma que se expulse el agua y pueda extraerse la materia mineral, sin impurezas que se segregan. Los componentes del asfalto refinado son el betún en un cincuenta y dos por cien, la materia inorgánica en un treinta y ocho por ciento y un diez por ciento de materia orgánica.

Asfalto de masilla que, se fabrica añadiendo roca natural pulverizada de forma gradual al betún refinado fundido, esta mezcla se agita durante unas cinco horas a doscientos o doscientos grados centígrados y, posteriormente se coloca en moldes para enfriarla. Una vez se consolida en bloques elásticos y duros, se puede fundir y usar para pavimento. Es resistente, duradero, no absorbente, a prueba de humedad, no inflamable y silencio, pues absorbe el ruido del impacto. Cuando la piedra caliza no bituminosa se mezcla con el betún residual, es de color marrón, al igual que el asfalto de masilla sintético.

Asfalto liquido o residual, obtenido por la destilación del petróleo crudo de base asfáltica a cuatrocientos veinticinco grados centígrados. Su aspecto es viscoso.

Asfalto recortado que se produce por destilación de asfalto en un solvente volátil. Contiene en su composición un ochenta por cien de asfalto y el resto de solventes añadidos.

Asfalto artificial obtenido por la evaporación del componente volátil del alquitrán de hulla. Se forma gracias a una mezcla de carbón, brea, escoria de hierro molido, aserrín, tiza, etc. Su composición es un doce por ciento de betún, un ochenta y siete de arena y un uno por ciento de materia orgánica.

Cemento asfáltico que se obtiene mediante la oxidación del asfalto a alta temperatura. Los aceites más ligeros de la composición se extraen a su temperatura de condensación, dejando un material residual que es el cemento asfáltico. Este tipo de asfalto se utiliza para fabricar pavimentos, impermeabilizar y como junta de dilatación en el hormigón.

Dentro de sus propiedades físicas, químicas y características de las que goza el asfalto en general, utilizado para la construcción, detallamos las siguientes:

  • Presenta color marrón, gris oscuro y negro.
  • Su viscosidad es muy alta.
  • Posee una buena densidad.
  • Su procedencia es la destilación fraccionada del petróleo crudo.
  • Ofrece un amplio rango de temperatura de endurecimiento.
  • Su durabilidad es elevada.
  • El endurecimiento es lento.
  • No presenta toxicidad.
  • No resiste muy bien el agua.
  • Es soluble en sulfuro de carbono.

La composición del asfalto se puede separar en cinco tipos de componentes que se caracterizan por poseer una gran similitud química y comportarse de una manera similar.

Utilidades y aplicaciones del asfalto

Las aplicaciones y usos de este material, van más allá de la fabricación de carreteras. El asfalto es un material muy interesante, dadas sus propiedades, las cuales lo convierten en uno de los materiales por excelencia en el mundo de la construcción. No obstante, también se utiliza de forma habitual en sectores como la agricultura, la arquitectura, la industria eléctrica e incluso, automóviles.

Si bien es cierto que su principal uso en la actualidad, sigue siendo para la construcción de carreteas, vías, caminos, rieles de tren y rellenos de puentes. Dentro de este sector, el material asfáltico, dispone de las propiedades adecuadas para aplicaciones de este tipo, su impermeabilidad, la capacidad aglutinante, su resistencia a la intemperie y la flexibilidad que proporciona a las pistas de automóviles e incluso aviones. Los tipos de asfalto utilizados en este tipo de construcciones son los de roca comprimida y los de masilla.

La pintura asfáltica es fabricada con los asfaltos bituminosos como ingrediente principal cuando la aplicación va a ser sobre paredes húmedas y estructuras de hormigón.

Por otro lado, el concreto asfáltico, resultante del refinamiento según especificaciones concretas que le confieren propiedades aglutinantes, mezclado con agregados finos o gruesos como el basalto. Este tipo de asfalto es muy utilizado en la pavimentación de carreteras y pistas de aterrizaje de aviones, donde la flexibilidad que caracteriza a este material, unida a su resistencia lo hacen ideal.

Otras de las aplicaciones y usos del asfalto pueden ser:

  • Construcción de presas, embalses, áreas de juego y parques.
  • En el sector de la agricultura, es muy habitual su utilización para revestir los estanques de retención donde se crían peces o incluso, en los corrales de contención para el ganado.
  • Este material, es la solución ideal para el control de inundaciones y la erosión que se produce en el suelo a causa del tiempo.
  • En el mundo del motor, los fabricantes de coches, utilizan el asfalto para evitar la oxidación y el ruido que genera la carretera en guardabarros y capó de los vehículos.

Para finalizar, hablaremos brevemente del asfalto en frío. Este tipo de asfalto esta concebido y desarrollado para un uso especifico: tareas de mantenimiento y reparación de calzadas a pequeña escala. Esta pensado para el mantenimiento vial, la pavimentación y reparación de pequeñas superficies, evitando la necesidad de aplicar el asfalto caliente que requiere de mayores recursos y tiempo para su aplicación.

Si lo contraponemos con el asfalto caliente, el asfalto en frío, presenta algunas ventajas, entre las que cabe destacar su rapidez de aplicación y secado, por lo que no es necesario hacer cortes de tráfico importantes. Además de su facilidad para ser aplicado, muy superior a la del asfalto caliente, puesto que no requiere la utilización de maquinaria pesada, resultando un material más económico y eficiente. Tampoco es necesario un gran despliegue logístico para aplicar el producto ya que la misma preparación puede hacerse en la zona de trabajo de forma fácil y sencilla.

Para aplicar este tipo de asfalto, no es necesario cortar la calle ni introducir maquinaria que lo mantenga a la temperatura adecuada y posteriormente, para enfriarlo. Basta con limpiar la zona, eso sí, perfectamente y de forma que no queden residuos. Aplicar el producto sobre la zona afectada y en la cantidad adecuada, de una sola vez y no en capas o fases. Por último, eliminar los excesos y asegurar que se quede bien compacto para que ofrezca un resultado uniforme y resistente.

Aunque parezca una solución instantánea, este tipo de asfalto presenta por igual una alta resistencia, no se cuartea y mantiene su adherencia, no se pega a los neumáticos, favorece el drenado de agua y mantiene todas sus propiedades frente a los cambios de temperatura.

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