La sociedad se ha transformado de un modo espectacular en los últimos años. La verdad es que ya no hay nada que sea exactamente igual a cómo era hace una década y media. Todo es diferente y se ha ido moldeando a las nuevas tecnologías que han ido surgiendo con el simple paso del tiempo, especialmente con Internet, que sin duda ha sido el motor del gran cambio que se viene originando de manera continua durante este siglo XXI. Y lo mejor de todo es que el cambio no para: en 10 años, todo habrá vuelto a cambiar. Así de simple.
Uno de los factores que está teniendo mucho que decir en la transformación de la sociedad y que está directamente relacionado con Internet es el ecommerce. En efecto, este tipo de comercio ha supuesto un antes y un después para una gran cantidad de empresas tanto españolas como internacionales. En primer lugar porque ha mejorado sus niveles de venta y de negocio. Y en segundo lugar porque ha afectado de un modo muy intenso y directo a su estructura logística.
La competencia entre las empresas es otro de los aspectos que se han desarrollado con el ecommerce. Tengamos en cuenta una cosa: con Internet, el número de entidades a las que puede tener acceso un cliente que está buscando un producto determinado es mucho mayor. Esta es una diferencia elemental y que hace más justo y más competitivo el mercado, haciendo que los monopolios y los oligopolios sean cada vez más difíciles de encontrar. La red ha sido una ayuda inestimable para conseguir ese propósito.
El ecommerce, por otra parte, ha servido de ayuda de manera indirecta a muchas clases de negocios. Pongamos por caso el de los fabricantes de cajas de cartón. Teniendo en cuenta el volumen ingente de envíos que se producen cada día a lo largo y ancho de nuestra geografía, es evidente que el uso de cajas de cartón para almacenar todo tipo de productos se ha visto incrementado. Y es que el ecommerce, en función de las palabras que nos han dedicado los profesionales de Cartonajes Mimó , ha sido el salvador de muchos negocios tanto a nivel nacional como Internacional.
Un fenómeno global que en España ha calado hondo
El ecommerce es un fenómeno que ha calado hondo en occidente y que en España goza de una popularidad de lo más plausible. Y esto es solo el principio, puesto que, según un artículo publicado en el portal web Modaes, el crecimiento del ecommerce dentro de nuestro país va a ser del 15% anual, hasta los 15.000 millones de euros, una cifra estratosférica que pone de manifiesto que el futuro gira en torno a un fenómeno como este sin asomo de duda. Y quien no se adapte va a tener un problema de calado.
Los datos que nos dejó, por ejemplo, el año 2017 también son un vivo ejemplo de lo que supone el ecommerce para el mercado actual: en el segundo trimestre de dicho año, según el diario ABC, el crecimiento dentro de este sector fue del 23%, llegando a facturarse una cifra que fue superior a los 7.300 millones de euros. La verdad es que las cifras marean, pero son reales y hacen ver que la potencia de este nuevo modelo de negocio en la red es mucho más grande de lo que nunca nadie pudo llegar a imaginarse.
La competencia entre las empresas es, como hemos apuntado anteriormente, una de las grandes beneficiadas de todo esto. Es evidente que adaptarse al ecommerce no es algo sencillo puesto que requiere de una inversión sobre todo en estructura logística para tratar de satisfacer las necesidades de los clientes. Pero no cabe duda de que, en Internet, una persona va a tener un abanico mucho mayor de posibilidades cuando desee adquirir un producto o servicio. Esa, para una economía, es una ventaja tremenda, un soplo de aire fresco que no solo es sano, sino también rentable.
Seguro que dentro de 10 años han vuelto a cambiar tanto las cosas que pocas cosas de las que aquí se dicen tengan sentido. Pero lo que sí que es cierto es que la actualidad es la que es y se parece en muy buena medida a lo que hemos descrito a lo largo de este artículo. Mucha gente, tanto desde el punto de vista del consumidor como de la oferta, necesitaba algo que equilibrara fuerzas como ha hecho el ecommerce en estos últimos años. Estamos en el camino del equilibrio. No perder esa senda es necesario e imprescindible.